México D.F. a 10 de Mayo del 2013.
Querida mamá:
En está epístola que te escribo y describo cada sentimiento que siento
hacia ti...
El amor que siento hacia ti es más grande que el universo; este amor se ha
hecho más y más grande, aquel 29 de mayo, la fecha en que nací, en la que vi
por primera vez la luz de este mundo, la luz de la vida, la luz que empezó a
iluminar el camino de mi vida y esa eres tú, mami querida.
Ese respeto que te tengo día con día, ya que me has enseñado muchas cosas,
cosas que me servirán a lo largo de mi vida, que me ayudaran en cada situación,
a poder enfrentar cada reto con valentía y decencia, a darle valor a cada
objeto que me has dado, a amar a las personas que merecen ese sentimiento, a
comprender que cada situación tuene su momento, a no querer correr sí apenas
puedo gatear.
El cariño y afecto que siento por ti, porque has sido mi pilar cuando siento
que me desvanezco, aquel pilar que siempre está para mantenerme de pie, ya sea
con sus palabras o acciones, cuando necesito ayuda haces el mayor esfuerzo por
ayudarme y entenderme, sé que en esta etapa de mi vida es como una montaña rusa
en la que hay partes muy altas y muy bajas, en las que a veces es difícil de
entender a uno, pero estoy completamente segura de que tú siempre estarás ahí,
tratando de hacerme sentir bien.
En ocasiones podré perder la noción de algunas situaciones, perder algunas
objetos, pero lo que nunca perderé es todo lo bueno que me has enseñado…
Muchas gracias mamá por todo, y te agradezco de todo corazón todo, todo lo
que me has dado. Ya no encuentro las palabras para continuar escribiendo lo
maravillosa que has sido conmigo, GRACIAS.
Te quiero mucho mamá. ♥
Atte. María del Pilar Zamitiz Prudencio (Pily)
P.D.
Eres la mujer más bella
que he conocido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario